Un buen manga que basa su éxito en unos personajes atractivos y una ambientación novedosa y bien plasmada, gracias a un dibujo simpático y correctamente encajado a un argumento interesante, que sabe destacar de una base algo vista. Nakamura, además, añade al conjunto un tono muy gris que otorga un cierto realismo a las historias. Sus protagonistas son un grupo de "perdedores" que no han dejado que el sistema los devore y se han dedicado a sus sueños artísticos o deportivos, luchando algunos de ellos contra el propio tiempo, porque se han decidido a dar el paso cuando ya han dejado atrás la juventud. A pesar de reveses y temores, y sobre todo, de un futuro más que incierto, se han dado la oportunidad a sí mismos. El joven Ryô, teóricamente el protagonista de la serie, ha abandonado el instituto sin titulación alguna y vive en pareja a la espera que surja su oportunidad. Curiosamente, no es un personaje que en principio atraiga las simpatías del lector, lo que de nuevo hace más sólido el conjunto.
No hay capítulo!